Los
asturianos Warcry nos tienen acostumbrados a sacar trabajos bien
resueltos, practicando su heavy metal tradicional, de la misma
escuela que impulsaron junto a otros grandes grupos españoles. El
conjunto de bandas como Avalanch, Saratoga, Ankhara, Cuatro Gatos,
etc. no ha sido más que la punta del iceberg, auténticos adalides
de nuestro país que marcan el paso del movimiento rockero
en España.
En
los últimos años nos han regalado varios discos en muy poco
tiempo. Su aportación a la escena española no ha dejado a nadie
indiferente. Han tenido muchos detractores, tantos como seguidores en
la península; pero ellos, lejos de achantarse, han seguido con su
ritmo de trabajo. Parir un disco cada año, desde que en aquel 2002
apareciera su primer larga duración, no está al alcance de
cualquiera, solo de aquellos con un claro objetivo. Y como bien han
tratado de exponer, su anterior LP, ¿Dónde está la luz?, ha sido
su obra maestra hasta el momento, con una puesta al día de su
sonido, aún más maduro y queriendo llegar a un espectro más amplio
de público.
De
la mezcla de sus anteriores trabajos y del mencionado ha surgido un
híbrido, que viene a recordar de dónde vienen y hacia dónde van. En
esta ocasión, han hecho un análisis de su interior y se han recordado
así mismos lo que han venido ofreciendo, puliéndolo para
presentarlo. Tenemos un nuevo disco de Warcry emocionante y, sobre
todo, sincero y continuista.
En
este disco nos encontramos con heavy metal crudo y rápido, a la vez
que nos sumergimos en el hard rock, sin dejar de lado las tiernas
baladas a las que nos tienen acostumbrados. La lista de cortes viene
bien repleta de jugosos contenidos: “Que Vengan Ya”, todo un
alegato contra sus enemigos; “Ulises”, en su línea de temas
mitológicos e históricos; la cara más intimista en “Tu recuerdo
me bastará”; “La Vieja Guardia”, derramando identidad y
nostalgia; “Un Poco de Fe”, alentando para sobrellevar el día a
día; “El Más Triste Adiós”, preciosa balada con grandes dosis
de sentimiento; la dureza y la cara más agria de la vida viene
representada por “Buscando Una Luz”; melodía y esperanza para
“Ha Pasado Su Tiempo”; “Redención”, con grandes teclados y
marcado pulso melódico; Heroísmo y valentía para “Mirando Al
Mar”; para terminar, “Más Allá”, con un estribillo muy
pegadizo.
Como
podéis observar, Warcry no han cambiado su estilo de componer, ni
falta que hace, pues lo que han perpetrado supera con creces muchos
de los grandes bodrios que salen al mercado.
Reseña
retocada de la originalmente publicada en noviembre de 2006.
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